El restaurantero Jorge Peraza Bernal, reconocido apenas hace unos días por su trayectoria en el ramo, fue asesinado a balazos en el interior de la propiedad donde estuvo su restaurante llamado La Chuparrosa Enamorada, en Bacurimí, Sinaloa.

Apenas hace una semana, el 29 de octubre, su restaurante había sufrido un incendio, que en ese momento la Fiscalía de Sinaloa descartó que fuera provocado.

Al día siguiente, Jorge Peraza fue reconocido en el Congreso por la (Camara Nacional de la Industria Restaurantera) CANIRAC debido a su trayectoria de muchas décadas en el ramo restaurantero.

El crimen del empresario fue reportado a las 3 de la tarde al 911, cuando un familiar informó que sufrió un atentado al interior de la propiedad, ubicada entre Bacurimí y Villas del Río, a un lado del canal Rosales de Culiacán, Sinaloa.

Al llegar personal de Cruz Roja confirmó que el restaurantero de 76 años de edad ya no presentaba signos vitales.

¿Quién era Jorge Peraza?

Jorge Peraza era reconocido por el gremio restaurantero como un hombre de larga trayectoria, quien además se sumaba a causas sociales en contra de la inseguridad.

Tras el incendio de su negocio, lanzó una campaña de venta de comida para recuperarse de los estragos y durante su discurso en el congreso, declaró que «renacerían como el Ave Fénix» dentro de las cenizas.

La ola de violencia en Sinaloa parece no tener fin. Durante la madrugada de este miércoles, un grupo armado irrumpió en una vivienda del fraccionamiento Tellerías de Mazatlán para secuestrar a cuatro personas que se encontraban en el lugar.

De acuerdo con el reporte de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, se recibió una llamada al número de emergencias 911 que denunciaba que tres hombres y una mujer fueron sacados por la fuerza de una casa del fraccionamiento Tellerías.

La denuncia refiere que cinco sujetos armados ingresaron al domicilio, sometieron a las personas y se las llevaron.

La Fiscalía General del Estado se hizo cargo de las investigaciones y una fuente cercana al caso señaló que la vivienda era rentada por las personas secuestradas.

Tras este secuestro, la SSP municipal implementó un operativo de vigilancia en el fraccionamiento Tellerías y sus alrededores, incluida la zona turística, informó su titular, Jaime Othoniel Barrón Valdez.

El funcionario mencionó que, aunque los oficiales municipales atendieron el reporte, es la Fiscalía estatal la que asume las investigaciones.

«Se atendió el reporte; sin embargo, como en las demás ocasiones es una investigación que le corresponde a la Fiscalía General del Estado. No se pueden dar más datos, ni nombres, ni cómo sucedieron los hechos, lo que sí les puedo yo reportar es el hecho que es afirmativo», declaró.

El funcionario pidió a la población reportar cualquier situación que se considere inusual o de riesgo.

Mazatlán vive desde hace semanas una crisis por desapariciones que ya alcanzaron los más de 50 casos, en un contexto de violencia que inició desde el 9 de septiembre con una serie de enfrentamientos en la región centro del estado tras la captura de Ismael El Mayo Zambada y Joaquín Guzmán López, hijo de El Chapo Guzmán.

Las autoridades de Mazatlán insisten en que el puerto no ha sido tocado por la inseguridad que se vive en otras zonas de Sinaloa

El Gobierno federal ha desplegado desde esa fecha a cientos de soldados en Sinaloa y equipamiento para contener los niveles de violencia, pero a diario se registran asesinatos -principalmente en la zona centro-, además de enfrentamientos, despojos de vehículos y personas privadas de la libertad.

Para el gobernador Rubén Rocha Moya, es un mito la reunión que Ismael El Mayo Zambada afirma tendría con él, Joaquín Guzmán López y Héctor Cuén Ojeda, el exrector de la Universidad Estatal de Sinaloa (UAS), el día que los líderes del cártel de Sinaloa fueron capturados por Estados Unidos.

El domingo, la Fiscalía General de la República (FGR) indicó que Héctor Cuén murió asesinado el 25 de julio en la finca que presuntamente se reuniría con Zambada y el hijo de Joaquín El Chapo Guzmán.

Además, la FGR advirtió de «presuntas responsabilidades penales y administrativas de policías, ministerios públicos, peritos y personal diverso de la Fiscalía General del Estado de Sinaloa» por la presunta fabricación de una escena del crimen que mostrara que el homicidio de Cuén había ocurrido en una gasolinera.

Es decir, Cuén Ojeda fue asesinado en el lugar donde El Mayo Zambada fue privado de su libertad, tal como lo relató en su carta publicada tras su detención.

En dicha misiva, Ismael Zambada lamentaba el asesinato de Cuén y afirmaba que mantenía una amistad con él desde hace tiempo.

Bajo esta premisa, en la conferencia de prensa de este lunes, se le preguntó al gobernador de Sinaloa si conocía el posible vínculo entre el también diputado electo y Zambada.

Nunca me platicó nada de tener una relación estrecha con el señor Zambada, tal vez no me tuvo la confianza necesaria

Sobre el presunto montaje en el homicidio de Cuén Ojeda, Rubén Rocha dijo que no daría su opinión respecto a las acusaciones de la FGR sobre la posible mala praxis de la Fiscalía de Sinaloa.

Recordó que fue él quien promovió que FGR se encargara de realizar las indagaciones del asesinato de Cuen Ojeda y celebró los avances en la carpeta de investigación.

«Nadie está excluido de que sea investigado, citado, en el texto que leí ayer dice que ellos presumen, derivado de su investigación, que fue un montaje.. No sé a quiénes podrá alcanzar y a quiénes no, ellos adelantaron servidores públicos», agregó el mandatario.

Otro cuestionamiento al gobernador fue sobre la posible responsabilidad de la fiscal general actual, Claudia Zulema Sánchez Kondo, en el caso de Héctor Melesio Cuen Ojeda.

Al respecto, Rocha Moya respondió que Sánchez Kondo no participó en la investigación del caso, ya que en ese momento ella era vicefiscal general de la zona centro.